Dependiendo de las necesidades de cada familia, se puede optar por una cocina de gas o una eléctrica. Las cocinas de gas tienen una ventaja que se puede cocinar con cualquier olla o sartén independientemente de su material. Las cocinas eléctricas son más seguras y fáciles de limpiar.
Has de cerciorarte de que gas tienes instalado en casa. Además, debes de ver qué espacio tienes para la instalación del electrodoméstico. Puedes elegir entre diferentes características que tenga el aparato como: encendedor eléctrico, quemador de alta eficiencia, corona triple o quemador Wook, entre otros.
Dependiendo de las dimensiones de tu cocina puedes poner una cocina semiprofesional. Estas cocinas no sólo están pensadas para restaurantes, si tu pasión son los fogones puedes encontrar un gran aliado con este electrodoméstico.